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Sumarse es muy sencillo, solo hace falta tener ganas de ayudar.

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Es importante que sepan que la finalidad del proyecto no solamente es poder acercar una bebida caliente a una persona en situación de calle, ya que consideramos que el mayor problema de estas personas no es el ECONÓMICO, sino el SOCIAL.

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Tratamos de luchar contra la discriminación y poder así de a poco volver a insertar a cualquier persona se encuentre en esta situación, nuevamente a nuestra sociedad.

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Hoy por hoy el café es solo un SIMBOLO.

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Intentamos presentar una nueva costumbre a la hora de pagar la cuenta: PENSAR EN EL OTRO.

Pedimos a cada local que se sume, que se comprometa a repartir cada café recaudado. No hay un control de parte nuestra, cada local será responsable de contabilizar la entrada y salida de cafés. Recomendamos implementar algún sistema visible para demostrar transparencia. Pueden ser pizarras, urnas, frascos, etc... ‬

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​El ideal del proyecto es que el café se pueda tomar DENTRO DEL LOCAL. En el caso de tener alguna dificultad para que esto se pueda realizar, se puede implementar la modalidad del café para llevar o se podrán juntar varios cafés pendientes para luego donarlos a una institución (Iglesia, comedor u hospital). Pedimos que nos informen en el último caso.  

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Por otro lado, pedimos que en lo posible el precio del café pendiente sea más económico y que, si esta dentro de sus posibilidades, agreguen un acompañamiento al mismo (una medialuna, por ejemplo).

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Por último, pedimos que se respete la simpleza del proyecto. No trabajamos con donaciones y queremos que se mantenga como un proyecto de índole social y no político.